¿Cómo pueden los edificios ser flexibles y específicos? Las respuestas aquí son críticas ya que las instituciones intentan mantenerse al día con los rápidos cambios en la tecnología, los planes de estudios, las técnicas de enseñanza y la demografía.
MUCHOS DE LOS MEJORES COLEGIOS Y UNIVERSIDADES en el país han invertido cientos de horas en desarrollar planes maestros para sus campus que incluyan tanto una filosofía como un plan de acción para edificios, paisajes, carreteras, viviendas para estudiantes, seguridad, pasillos de comunicación e integración con las comunidades circundantes. Estos planes maestros transmiten una visión que abarcará décadas y sirven como planos para la vida estudiantil y para los entornos de aprendizaje deseados. Sin embargo, todos los planes maestros lidian con una tensión inherente: mientras que su objetivo es ofrecer una guía clara y detallada, también están sujetos a revisión en función de las cambiantes necesidades actuales.
Esta idea, el requisito de flexibilidad en respuesta a las necesidades cambiantes, se está convirtiendo en una norma en todo el proceso de planificación y ahora está siendo reconocida en la mayoría de los planes maestros de las universidades.
Independientemente de las herramientas utilizadas en el desarrollo de un plan de instalaciones estratégicas, el plan de instalaciones estratégicas debe verse como un documento vivo que informe de hallazgos y que haga recomendaciones consideradas para implementar el plan dentro de un marco de tiempo realista, pero a la vez manteniendo la flexibilidad para adaptarse según lo requiera la empresa.
Tener en cuenta la flexibilidad al desarrollar un plan maestro se ha convertido en la mejor práctica a escala nacional e internacional, ya que los profesionales pretenden abordar un mundo en constante evolución.
Sin embargo, el concepto de flexibilidad está en conflicto directo con la naturaleza de la mayoría de los edificios. Históricamente, los edificios universitarios se han considerado estructuras permanentes, hitos diseñados para resistir el paso del tiempo para siempre. Esto es evidente al explorar los espacios y áreas comunes de muchas universidades. Desde los comedores góticos de Princeton hasta La Rotonda de Jefferson en la Universidad de Virginia, la naturaleza antigua de los edificios de los campus transmite la sensación de estar “impregnada de historia” y esto suma a la altura de la escuela. Pero, cada vez más, las escuelas están bajo presión para evolucionar y modificar las instalaciones para satisfacer las demandas de los nuevos programas. Esto es más evidente en los campus de tecnología e ingeniería, e incluso en algunos programas de artes.
Las instalaciones deben admitir tecnologías, planes de estudios y técnicas de enseñanza nuevas, por lo que es casi seguro que a lo largo de esta década serán necesarias modificaciones. Un campus adaptable y configurable es una respuesta natural al mundo cambiante en el que vivimos.
La construcción modular proporciona una solución sólida para adaptarse a la creciente necesidad de instalaciones ágiles en los campus. ABC MODULAR impulsa la transformación del entorno de aprendizaje y la enseñanza para que sea más activa y atractiva. A medida que los institutos y universidades continúen avanzando en el diseño, se implementarán instalaciones ágiles que fomenten entornos de aprendizaje de vanguardia con un enfoque en la integración y la flexibilidad para ayudar a garantizar que los campus puedan volver a crearse fácilmente para satisfacer las necesidades actuales y futuras.